NUEVO ENCUENTRO FAMILIAR

Estimada Familia, les cuento que la idea de un nuevo encuentro familiar ya está en proceso, con primos trabajando de a poco en ello.

Esperamos contar con su apoyo.

Desde ya lo publicamos, para que los familiares de Argentina y porque no, del resto del mundo tengan la posibilidad de organizarse, y venir a Montevideo.

Escriban a nfossati4@hotmail.com quienes tengan datos que aportar, o sugerencias.

Si salio el primero, con un poquito del aporte de todos, sale el segundo.

Un abrazo.

Algunas imagenes de Carlos

Lo que me puso Mariale en el mail cuando me mando estas fotos, creo que es la mejor manera de ilustrarlas: "Intenté buscar fotos que resumieran su ternura, inteligencia, sentido del humor.. pero no hay caso. Me quedo corta. Igual seleccioné algunas fotos."

  1952 Anuario Seminario

 2000 y algo ICAAC San Francisco

 2000 y algo Papi y su sentido del humor Safari Africano

1968 Casamiento Iglesia

 

1970 Papi Mami y Ceci

1991 enVersalles

2001 Papi y Ma Clara

2008 Con Diego recién nacido

Gracias Mariale por las fotos, Gracias por compartirlas.

Discurso Dr. Quadrelli 2010-03-17

Palabras pronunciadas por el Presidente de la Academia Nacional de Medicina del Uruguay en la inhumación de los restos del Académico Carlos Gómez Fossati.-

Con la desaparición física del Académico Carlos Gómez Fossati, la Academia Nacional de Medicina del Uruguay pierde a unos de sus integrantes que presentaba una de las historias profesionales médicas más brillantes.-

Ingresó a la Academia por el voto secreto de sus pares el 18/12/2004.

Su impecable trayectoria estudiantil y más aún su descollante carrera docente, dieron méritos más que suficientes para ocupar el cargo de Académico Titular. Junto a estos antecedentes que forjaron su estructura científica, la calidad ética y moral de Gómez Fossati, sellaron definitivamente su estatus de Académico.

Su presencia en los plenarios siempre significó una opinión ajustada y esclarecedora en todos los temas que se trataban.

Por su excelencia científica y su riguroso y equilibrado criterio, integró durante los cortos 5 años de Académico, los tribunales del “Gran Premio Nacional de Medicina” en 3 oportunidades y en igual número de casos el tribunal del “Premio El País”. Por iguales razones formó parte de la Comisión Calificadora Intersectorial Permanente, que tiene por objetivo el juzgamiento de los antecedentes científicos de los aspirantes a Académicos.

Recordamos su magnífica exposición en el plenario de Académicos sobre el Programa de Trasplante de Hígado, tarea que asumió con enorme entusiasmo y desinterés de todo tipo luego de su cese como Profesor Director de Clínica Quirúrgica. Tampoco olvidamos su ciclópea tarea encomendada por la Academia en la organización para conmemorar los 40 años del primer trasplante de riñón en el Uruguay, situación histórica que Gómez Fossati la vivió como uno de los actores en primera línea.

Hace apenas unos meses, la Academia lo nombró integrante del Comité de Ética de la Investigación, organismo llamado a desempeñar un importante rol en el campo de la investigación en seres humanos.

Nos conocimos con Carlos en el año 1955 cuando cursábamos 1er. Año de Preparatorio en el Colegio del Seminario. Desde entonces, la empatía se instaló; horas de estudio nos unieron más de una vez en aquel lejano tiempo. Luego, realizamos caminos distintos dentro de la Medicina.

Nos reencontramos primero en el barrio y luego en la Academia. Era el mismo Carlos de siempre: humilde y bueno. Trató a los demás con respeto y tolerancia. Enfrentó su enfermedad con la dignidad y entereza que siempre formaron parte de su persona.

Fue uno de los Grandes.

Que en paz descanse y para los que queremos creer en Dios, que lo reciba en su gloria.-

Discurso Dr. Crestanello 2010-03-17

Estamos Reunidos junto a Carlos Gómez Fossati.

Carlos, uno de esos seres que aparecen muy de tanto en tanto en las comunidades y que con su presencia, su pensamiento y su acción iluminan en forma particularmente destacada su tiempo y su entorno.


A lo largo de múltiples y muy diferentes contactos como familiares, amigos, compañeros, colegas, colaboradores, maestros, discípulos, pacientes o simplemente conocidos, construimos nuestra propia imagen de él, la coloreamos con innumerables anécdotas personales y le dimos el calor del afecto y el reconocimiento por todo lo que él nos aportó.
Todas ellas resaltan su inigualada calidad humana y profesional, su rectitud, su entrega, su perseverancia, su infatigable pasión por hacer bien las cosas, la profundidad de su pensamiento, la vastedad de su cultura, la actualización de su información, su inagotable interés y curiosidad por todo y su ritmo aparentemente lento pero constante y singularmente eficiente.

Y todos valoramos especialmente estas cualidades porque sabemos que eran auténticas, que las practicaba con profunda convicción, sin claudicaciones, con modestia, con bajo perfil y jamás buscando ventajas o beneficios para sí. Su presencia era una referencia  completamente natural para nuestras vidas.
Doy fe de ello porque durante 53 años compartiendo una misma carrera, una misma profesión y muchos ideales, fui privilegiado con su valiosa amistad.

Me he preguntado cómo interpretaría Carlos esta circunstancia.

Estoy seguro de que con la calma y profunda racionalidad con que encaraba las situaciones más adversas, nos señalaría el error de interpretarla desde las limitaciones de una perspectiva exclusivamente biológica. Que olvidamos que su cuerpo era mortal. Que por eso, su enfermedad que le llegó en forma insidiosa y la prolongada sucesión de complicaciones por cierto inesperadas que terminaron con su vida, nos sumen en el estupor, el desconcierto y la impotencia.

Desde nuestras convicciones filosóficas y religiosas limitadas y seguramente diferentes, todos intuimos que la admirable complejidad y riqueza de su espíritu no pueden haber desaparecido; que a partir de ahora seguramente habitan en alguno de los grandes lugares destinados a quienes como él vivieron su vida de manera ejemplar.

Lo que Carlos perdió es su cuerpo material, la herramienta inevitablemente efímera con que actuaba entre nosotros.

Si procedemos con sus mismos principios, autenticidad, convicción y entrega, entre todos le daremos un cuerpo que sustituya al que ha perdido. Y así podrá seguir obrando entre nosotros, señalando e iluminando nuestros caminos, y, en definitiva, haciendo que en lo que fue su entorno su después continúe siendo cada vez mejor que su antes. 

No estamos aquí entonces despidiendo al entrañable amigo desaparecido. Estamos junto al compañero en su tránsito hacia otra realidad no sometida a las limitaciones del cuerpo material mientras alcanzamos la calma necesaria para recordarlo y asumir el compromiso de continuar poniendo en práctica su mensaje.

Una noticia importante para todos

Pedido muy especial para Carlos.

Hoy les escribe Federico Butler, hijo de Alicia Gomez Fossati, sobrino y ademas ahijado de Carlos Gomez Fossati, autor y principal ideologo de esta idea del Encuentro en su momento y de este blog despues. Él ha sido el que ha juntado y organizado toda esta documentación y ha armado con mucho amor y dedicación, todo este puzzle de la historia de nuestro apellido en el Uruguay y el mundo.

Pero hoy no escribo para hablar de nuestro apellido, sino justamente de Carlos. Para los que no se han enterado, en este momento él se encuentra muy grave de salud, hace mes y medio que esta en el CTI en estado muy delicado y esta luchando por su vida con una voluntad increible. Ya ha pasado por 4 operaciones dificiles y su estado se ha complicando cada día más.

Para toda su familia y amigos, la esperanza de su recuperación esta viva y fuerte, y aunque parezca milagrosa. Yo en el fondo no me imagino otra cosa que volver a hablar con él y ayudarlo en lo que uno pueda a seguir adelante. Pero hoy lo que podemos hacer es bastante limitado, ademas de acompañar a su familia más cercana, lo unico concreto que SI podemos hacer es donar sangre o conseguir donantes para Carlos.

Carlos esta siendo dialisado y recibiendo muchas transfuciones, por lo que es muy importante conseguir donantes, en este momento se necesitan 23, y seguramente esta cifra aumente.

A todos aquellos que puedan, o que consigan donantes, les pedimos dirigirse a la Asociación Española y alli donar para Carlos Gomez Fossati y luego llevarle el papel que les dan allí a Laura o cualquiera de su familia que siempre estan en la sala de espera del CTI, en el 2do. piso.

Desde su lugar, a su modo, en silencio, con humildad y mucha sabiduria, Carlos ha hecho mucho, por mucha gente, conocidos y desconocidos. Ojala podamos de alguna manera retribuirle. Muchas Gracias!!!

La familia Fossati Botta.

Con algunos documentos nuevos aportados por nuestro lejano pariente y amigo, Mauro, nos hemos enterado recientemente de un nuevo descendiente de Pietro y Catherina, Luigi, nacido el 19 de febrero de 1837. Fue el sexto, de siete hermanos, ubicado entre Agnese y Mansueto, el benjamín. Fue bautizado en la parroquia de San Andrés Apóstol, de Rocchetta, como casi toda la familia y apadrinado por su hermano mayor, Carlo, por entonces de 14 años.

"Aloysius filius Petri et Catherina Botta, jug. Fossati hac natus, et hodie a me infra. baptizatus fut. Patrini fuere Carolus Fossati frater et Josepha Ferrero, f. Josephi..."


Este es el árbol actualizado de la familia Fossati Botta. Pietro había contraído matrimonio -en la iglesia de Rocchetta- el 13 de enero de 1823 y éstos son los siete hijos y catorce nietos que le conocemos hasta el momento.

Giovanni Fossati Astesiano.

Ha de haber sido el primero o uno de los primeros hijos varones de Carlo Antonio y Maddalena. El 8 de junio de 1787, fue el padrino de bautismo de su hermana Giuseppa Maria, nacida el día previo en Rocchetta. Quince años más tarde, en el año décimo de la República Francesa -"ventisette dal mese de maggio mille otto cento due vecchio stilo"-ya hecho cirujano, como su padre, actuó como testigo de un vecino, el "cittadino Giuseppe Verdese", que redactaba en Cairo su testamento frente al notario Paolo Manuelli.

La firma del novel cirujano en el testamento de su vecino.

Giovanni y Luigi Fossati Zunino.

El segundo y tercer hijo del matrimonio de Mansueto Fossati Botta y Teresa Zunino, permanecieron en su pago natal de Rocchetta y de sus familias son descendientes los actuales Fossatis de ese pueblo.

Giovanni se casó el 12 de agosto de 1896, en la parroquia de San Andrés Apóstol, a la edad de 32 años, con Onorata Sicco, joven de 21 años, hija de Angelo Sicco y Giuliana Massimina (ya fallecida). Ofició la ceremonia el párroco Luigi Delpiazzo y los testigos fueron su hermanastro Cesare Fossati Perrone y Bartolomeo Barbero, vecino de Rocchetta. Su padre, Mansueto aún vivía, no así su madre, Teresa Zunino y su madrastra Margherita Perrone, ambas ya fallecidas a la fecha.

Onorata, que se firmaba Onorina, pertenecía a una familia -los Sicco- asentada de largo tiempo atrás en el lugar y de la cual partieron luego algunos emigrantes al Uruguay, donde conservaron una gran amistad con sus coterráneos Fossati allí presentes.

Giovanni tuvo cinco hijos, 4 varones y una mujer. Uno de aquellos, Walter, fue el padre de Laura Fossati de Cantoni, actual residente de Rocchetta; otro de ellos, el padre de Nello, su primo hermano, también residente en dicho pueblo.

Luigi, 4 años menor que su hermano, se había casado más joven, a la edad de 24 años, el 27 de enero de 1893, también en la parroquia de San Andrés Apóstol de Rocchetta, con Giovanna Scarzella, de 27 años, nativa de Montevideo. Era hija de Giovanni Scarzella y Teresa Viglione, nieta materna de Pio Viglione, integrante de la legión italiana de Garibaldi en el Uruguay y sobrina de Pedro Viglione, que fue quien escribió las memorias de la legión en nuestro país.

Una de sus hijas, Emma Fossati Scarzella, acompañó a Montevideo en los años treinta a su marido, que había emigrado por razones de trabajo y falleció en el Uruguay, donde está sepultado. Emma retornó poco después a Rocchetta con sus hijos e hijas, donde permaneció hasta su fallecimiento.

El fallecimiento de Pietro Fossati Astesiano.

El 26 de agosto de 1850 y -según consigna el Párroco en el Atti di morte respectiva- a la edad de 56 años, fallecía en Rocchetta Pietro Martino Fossati Astesiano.

Atti di Morte (1850).
L'anno del Signore mille ottocento cinquanta ed alli ventisei del mese di agosto nella Parrocchia di S'Andrea Apostolo, Comune di Rocchetta Cairo è stata fatta la siguenti dichiarazione di deceso.
Il giorno ventisei del mese di agosto alle ore cinque di mattina nel distretto di questa Parrocchia, casa propria, munito de siguenti sacramenti: la penitenza ... oglio Sº e benedizione papale, è morto Fossati Pietro Martino d'età d'anni cinquantasei, di professione contadino, nativo del Comune di Rocchetta Cairo, domiciliato nel Comune di Rocchetta Cairo, maritato con Botta Catterina, figlio del fù Antonio Fossati e della fù Astesiano Maddalena.
Dichiaranti: Odera Carlo fù Giovanni d'età d'anni trentanove domiciliato in Rocchetta Cairo e Strada Filippo fù Luigi, d'età d'anni cinquanta, domiciliato in Rocchetta Cairo.
Il cadavero è stato sepolto il giorno ventisette del mese di agosto nel cimitero di questo Comune.

Le sobrevivían su viuda, Catterina Botta, sus seis hijos, los dos mayores -Carlo y Maddalena- ya casados y cuatro nietos, dos de los cuales llevaban su nombre: Pietro Angelo, de seis años, Pietro Michele de tres, Catterina Seconda -su ahijada de bautismo- de tan sólo 9 meses y Federico, de apenas 26 días de vida.

Muy poco después la familia comenzaría a separarse y Carlo, con su esposa Maddalena Arnello y sus tres hijos varones, se embarcaría para América.

1789: Carlo Antonio Fossati compra a la viuda de Arnello, dos terrenos sobre el río Bormida.

En el mes de junio de 1789, cuando en la vecina Francia deliberaban en Versalles los Estados Generales que iniciarían el proceso revolucionario que iba a culminar con la caída del antiguo régimen y el inicio de una nueva era histórica, en un pequeño pueblito de Liguria -Rocchetta di Cairo- el cirujano del lugar, Carlo Antonio Fossati, le compraba a Anna Maria, viuda de Giovanni Maria Arnello, dos terrenos sobre el río Bormida, por la suma de ochenta liras piamontesas y diez soldi.

Anna Maria, nacida en el pueblo de Serole, en la comuna de Asti del vecino Piamonte (foto: parroquia de San Lorenzo en Serole) era madre de tres hijos: Pietro, Bernardo y Francesco -fratelli Arnelli- y muchos años más tarde, una de sus nietas, Magdalena, hija de Bernardo se casaría sucesivamente con dos nietos de Carlo Antonio, Carlos y Leonardo, dando origen a los ocho varones Fossati Arnello, que serían los fundadores de esta rama de la familia en tierras americanas.



Vendita: Anna Marìa Vèdova Arnello, nella qualità di tutrice e curatrice delli pupilli e minore Pietro, Bernardo e Francesco, fratelli Arnelli, fu Gio. Marìa suoi fili nati, al Sign. Carl'Antonio Fossati.
L'anno del Signore mille settecento ottantanove, ed alli sei del mese di giugno doppo mezzogiorno nel luogo di Rocchetta Cairo.....avanti me Pietro Gio, Astesiano, Podestà del presente luogo.....
Personalmente constituita Anna Maria Vèdova di Gio. Maria Arnello, di questo luogo ed abbitante figlia del fu Giuseppe Grapo del luogo di Serole, nella qualità di tutrice e in tempo curatrice delli Pietro, Bernardino e Franco, fratelli Arnello fu D. Gio. Maria , il primo muto, e sordo, e li secondi in pupillare età.....liberamente ha ceduto, vendutto.....al Sign. Chirurgo Carlo Antonio Fossati, fu Domenico , della cità d'Acqui nel luogo di Cairo residente le due pezzi di terra campo zerbo, con due plante piccole di moro......per e mediante il prezzo, e somma di lire ottanta, soldi dieci Piemonte.....